Si aunque lo laves tu pelo sigue viéndose opaco, apagado y con aspectos graso, quiere decir que tenés que hacer algo más que simplemente lavarlo con shampoo y crema enjuague.
Existen una variedad enorme de shampoos para pelos grasos, que harán que la tendencia de tu pelo a engrasarse disminuya.
Otro tip importante es que recuerdes lavarte el pelo con agua fría o tibia, pero no muy caliente, ya que el exceso de calor estimula las glándulas sebáceas. También tenés que intentar no masajearte demasiado el cuero cabelludo cuando aplicás el shampoo ya que podés lograr el mismo efecto.
Un gran aliado es el limón. Si exprimís dos limones y los mezclás con un litro y medio de agua podés ayudar a los efectos de tu shampoo para pelo graso.
Y recordá que si no tenés tiempo de bañarte y tenés el pelo súper graso, la mejor forma de disimularlo es haciéndote un recogido canchero.